martes, 14 de abril de 2009

Mala raza...

Quería haceros participes de algo que ocurrió ayer y que me esta haciendo meditar muchos mis acciones a tomar.
Hace como dos o tres años apareció por el jardín de un vecino y gran amigo una gatita persa blanca y gris, la cual se veía claramente que se había escapado de casa tras una gran paliza. Esta gatita, a estado yendo y viniendo de continuo hasta que hace unos meses eligió con su lugar de residencia dicho jardín. Allí se le cuidaba, se de alimentaba e incluso se desparasitó al animal, el cual al principio se mostraba reticente a ser tocado pero últimamente se dejaba acariciar mientras comía.
La semana pasada estuve con este amigo y tuve la ocasión de poder tocar por primera vez a Susi, que así le llamábamos y atendía al nombre.
Ayer fui a la casa de mi amigo y al abrirme la puerta me dijo que tenia dos noticias una buena y otra muy mala, la buena era que tenia pollos de una especie de canarios, unos brunos pastel preciosos, la mala era que Susi, estaba en el patio dando vueltas sobre si misma completamente sucia, mojada y desorientada.
La cogimos y la llevamos al veterinario donde le hicieron una radiografía y vimos que le habían pegado dos tiros con una pistola de perdigones. Uno de ellos en la cabeza rompiéndose en tres trozas el perdigón y otro en el cuello. Tuvimos que sacrificar a Susi...
Atando cabos, hemos descubierto que un vecino de la urbanización, se dedica a disparar a los gatos que pasan por su jardín con una pistola de perdigones accionada por cartuchos de Co2... Que dispar es la vida, nosotros usando el Co2 para crear vida vegetal en el acuario y otro disponen de el para hacer el mal.
Ahora poneros en mi lugar, por eso digo que estoy (estamos) meditando mucho como actuar, ¿que se le puede hacer una elemento tan hijo de puta, habéis leído bien, porque su madre seguro que sera una santa y bellísima persona, pero el es un hijo de la grandísima puta y de tan mala raza, que se dedica a matar o mal herir a un animal que no a hecho ningún mal?
Mal final se agura para esta historia...